
Al definir la palabra ortorexia nos encontramos con que proviene del griego orthós (correcto) y orexis (apetito). Se interpreta como “apetito correcto”.
¿Qué es la ortorexia?
Una persona evidencia esta patología cuando ejerce un control excesivo y permanente sobre el tipo de alimentos que consume. Algunos especialistas la llaman ortorexia nerviosa si alcanza el grado de obsesión psicológica, diferenciándola, de este modo, de la ortorexia que no presenta mayores trastornos.
Origen del nuevo trastorno
Es una manifestación patológica moderna. Muchos especialistas sostienen que fue impulsada por una creciente presión social sobre el ser humano a preferir una alimentación determinada y saludable.
Consecuencias
Provoca problemas físicos y psicológicos en la persona.
La ortorexia impulsa trastornos físicos
Como la dieta que cumplen los enfermos de ortorexia es demasiado restrictiva suelen presentar desnutrición, deterioro del sistema inmunológico, osteoporosis, una marcada pérdida de peso, anemia, entre otras calamidades.
Problemas psicológicos
Se debe controlar permanentemente la propia ingesta de alimentos, en primera instancia, provoca una presión extenuante. Partiendo desde ese estado, el individuo se halla propenso a generar un alto grado de irritabilidad. Pero, más temprano que tarde, el cuadro podría derivar hacia trastornos de ansiedad o depresión. Su autoestima también corre un serio riesgo de verse afectada. Esto podría ocurrirle al no sentirse capaz de continuar con su plan alimentario.
Aislamiento social
El estilo de vida que adquiere un enfermo de ortorexia, lo induce a aislarse socialmente para no poner en peligro el estricto cumplimiento de su dieta. De tal manera, se priva de sus vínculos afectivos y termina perdiéndolos. Tal situación lo conduce a sentirse solo y vacío.
Causas de la ortorexia
Quizás el miedo sea, en innumerables casos, el cimiento de la patología. El temor a no poseer un perfecto estado de salud o el de engordar, en ocasiones, se acompaña de una mirada distorsionada de la propia figura corporal. Finalmente, la mente transforma ese miedo, que no puede manejar, en una obsesión por la comida, que sí puede controlar con cada ingesta, aliviando así la tensión.
Predisposición a padecer ortorexia nerviosa: Las personas que presentan una gran predisposición a padecer la enfermedad reúnen determinados rasgos de personalidad, a saber: son extremadamente perfeccionistas y tienen una pobre flexibilidad mental. Además, sufren de un trastorno de personalidad obsesivo compulsivo.
Un rubro con alta incidencia del trastorno alimenticio es el deporte de alto nivel. Por lo general, los deportistas tienden a prestar mucha atención al valor nutritivo de los alimentos, en relación con el rendimiento deportivo.
Tratamiento
El tratamiento requiere un abordaje multidisciplinario porque se trata de un desorden complejo. El equipo que se necesita debe estar integrado por médico, nutricionista y psicólogo. Y la terapéutica utilizada se diseñará de manera personalizada, en completa concordancia con las necesidades de cada paciente.
Uno de los mayores desafíos a los que se enfrentará el grupo de profesionales será el de enseñar al enfermo a comer variado y equilibrado, sin que reaparezca la obsesión.
El trabajo con el paciente de ortorexia también será arduo en el plano psicológico. El profesional indagará cómo se siente, qué le preocupa, cuáles son sus miedos, cómo maneja sus emociones, lo educará en todo lo referido a su enfermedad. El psicólogo, durante la terapia, también ayudará al paciente a mejorar la flexibilidad del pensamiento, el desempeño en el orden social y la autoestima. Leer más…
Mario Daniel Casas