
La enfermedad psicosomática tiene su origen en una reacción psicológica. Pero los efectos que produce en el paciente son totalmente reales.
Qué es la enfermedad psicosomática
En el griego, psiquis significa mente y soma se traduce al español como cuerpo. Por lo tanto, el término “psicosomático” se refiere al conjunto de enfermedades que son mentales y físicas a la vez. Ciertamente, las alteraciones psicosomáticas se originan en la mente e inciden de manera manifiesta en el cuerpo. Más precisamente, se trata de estados físicos que se generan a partir de emociones de temor y ansiedad.
¿Cuáles desórdenes pertenecen al grupo de enfermedades psicosomáticas?
Las dolencias de este tipo, con incidencia más generalizada en la población son estas: las enfermedades cardíacas que se desarrollan como consecuencia de estados nerviosos, el asma, las úlceras, los dolores de cabeza fuertes, el estreñimiento, las diarreas, algunas enfermedades de la piel, impedimentos en la sexualidad y diversas formas de alergia.
La enfermedad psicosomática existe de verdad
Debe entenderse que la patología psicosomática es una enfermedad tan verdadera como cualquier otra. En efecto, es erróneo creer que el afectado se encuentra totalmente sano. Porque la consecuencia de ello es ignorar los síntomas reales de una enfermedad originada por su mente. Entonces, es necesario que reciba el tratamiento adecuado para esa dolencia antes que se agrave su cuadro.
El mal profundo
En el caso de las enfermedades psicosomáticas el mal esta enquistado de manera muy profunda. Porque nace debido a impulsos emocionales sofocados. Por lo tanto, el paciente no tiene acceso a un control consciente de los síntomas psicosomáticos. En otras palabras, no puede evitar erupciones en la piel ni ataques de asma ni reacciones alérgicas. Y la causa de tales problemas de salud son conflictos emocionales, los que ni siquiera sabe que tiene.
Otro ejemplo de síntoma es el nerviosismo, dado que lo origina la mente. Pero cuando se desarrolla por completo escapa de su control y debe considerarse como si fuera una enfermedad física.
Reflejos condicionados
Conceptos previos
Se conoce que la causa de la neurosis en la persona radica en el conflicto que le genera el choque de emociones opuestas. Y también se sabe que muchas de las personas que sufren de conflictos emocionales no disponen de herramientas para controlarlos. Además, la medicina señala que el cuerpo humano se halla completamente bajo el mando del sistema nervioso central.
Los experimentos de Iván P. Pavlov
Los famosos experimentos del científico ruso, realizados en perros, demostraron que los reflejos condicionados opuestos tienen el poder de producir comportamientos neuróticos.
¿En qué consistieron las pruebas?
En primer lugar, Pavlov hizo sonar un timbre en el momento en que los perros recibían su ración de comida. Luego, accionó el timbre sin alimentarlos y verificó que los animales babeaban. En otros momentos, producía el sonido de un silbato e inmediatamente les propinaba una pequeña descarga eléctrica. Pronto, los canes comenzaron a inquietarse y a mostrarse temerosos ante los siguientes silbatazos, a pesar de no volver a recibir electricidad.
A continuación, realizó un nuevo experimento, utilizando los mismos perros, consistente en modificar el orden de los acontecimientos. De tal manera, tocaba el silbato y los alimentaba; cuando sonaba el timbre los sometía a la descarga eléctrica. Además, reproducía los sonidos del timbre y del silbato sin que ocurriera ni alimentación ni choque eléctrico. Finalmente, los animales presentaron marcados signos de neurosis. Y así se comprobaba que los reflejos condicionados de los canes, es decir, sus normas automáticas de conducta, estaban alteradas.
Desde entonces, el conocimiento que aportó el notable científico ruso con sus pruebas es de aplicación mundial en el campo de la psicología.
Mario Daniel Casas